martes, 8 de septiembre de 2009

Ordenadores para todos

Publicada el 4 de septiembre de 2009 en El Día de Cuenca y otros, supongo.

He tardado un tiempo en pronunciarme sobre el asunto porque he estado buscando investigaciones educativas que avalen la medida. Encontrar investigaciones educativas es una tarea difícil en este país, pero una vez que he localizado unas cuantas, puedo asegurar que ninguna afirma que si les damos a todos los alumnos una video-consola los resultados académicos mejorarán. Tampoco, si lo que les damos es un ordenador. Regalar a cada alumno de diez años un ordenador puede ser una buena medida de política social porque se democratizará el tuenti y alguien hará negocio con un fiftin, pero dudo que sea efectiva como medida educativa. En doscientas cincuenta palabras no tengo espacio para explicarme, pero diré que dudo que cierta manera de gastarse el dinero de las autoridades sirva, en líneas generales, para paliar las carencias que los estudios internacionales detectan en nuestro sistema educativo, que es lo que a la administración le preocupa. Es posible que pronto lleguemos al 6% del PIB en educación (que es la otra preocuupación de los que mandan), pero no sé si servirá para algo más que para presentar unas estadísticas bellísimas. Lo curioso del caso es que esta política del regalo universal que se está llevando a cabo (libros, ordenadores, dinero, facilidades para titular...) la critica, sotto voce, casi todo el mundo, pero nadie lo hace en voz alta. Bueno, sí. Una amiga mía que ve que su hijo, con un diez de media, no podrá estudiar Medicina porque con el dinero de la beca no tiene ni para empezar. Igual que hace treinta años.



2 comentarios:

  1. y si embargo se da la paradoja de situaciones tan absurdas como la mia. Este año como profesora a tiempo parcial no tengo derecho a ordenador. Tendré que hacer uso del privado si mis hijos adolescentes tienen a bien dejármelo un ratito : )
    ...he buscado por el blog un artículo tuyo que leí el otro día y que me encantó acerca de la ocupación, muy meditada , de la plaza y asiento en el autobus. Felicitarte por esa conversión tan literaria de una experiencia en la que muchos nos reconocemos.
    saludos
    eva

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  2. Muchas gracias por tu comentario.
    La verdad es que resulta paradójico que un buen número de ordenadores estén en manos de los familiares de los profesores que no saben ni quieren usarlos y que alguien que sí quiera usarlo no lo tenga. Pero habría soluciones. Una: algunos profesores (no muchos) declinaron el ordenador, así que podían haberse quedado en los centros para circunstancias como la tuya. Otra: la adminsitración sabe los profesores a tiempo parcial que hay, luego puede existir una dotación de ordenadores en las delegaciones para cubrir esos casos. Otra: facilitar la compra de los que de verdad quieran usar los ordenadores y no dar indiscriminadamente el material...
    Saludos

    Miguel A

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