jueves, 11 de octubre de 2012

Más de lo mismo

Publicada el 12 de octubre de 2012 en El Día de Castilla la Mancha .

El asunto es más o menos así. Usted pide una hipoteca a Bankia y, si no puedo devolverle el dinero con sus intereses, Bankia le quita la casa y el sueldo del resto de su vida. Y lo hace con el apoyo del Estado. En cambio, Bankia pide dinero a un banco alemán, francés o chino, da igual, y, si no puede devolvérselo, somos a usted y a mí a quienes el Estado obliga a entregárselo a los prestamistas, aunque ni siquiera supiésemos que existía una cosa que se llamaba Bankia. ¿Usted lo entiende? Cuando De Guindos dice que es muy importante que las cosas sean así no se pone colorado ni nada, seguramente porque ha trabajado siempre en el ramo y tiene una visión desvirtuada de la sociedad. Así como los maestros, que no salen jamás de la escuela, creen que es importantísimo que todos los chicos sepan las cosas inútiles que a ellos les sirvieron para ganarse la vida, así los banqueros creen que esa cueva de ladrones que se llama sistema financiero resulta imprescindible para el país. Si el ministro de Economía es un banquero, lo normal es que vea el Estado con ojos de banquero. Quizás si para enterrar a un muerto cualquier vale menos un sepulturero, como decía León Felipe, para ser ministro de Economía cualquiera vale menos un banquero. De momento, lo contrario no parece ser cierto, así que lo mismo nos interesaba probar con un experto en otra cosa. Algún humanista, por ejemplo. Alguien que vea que el Estado somos personas y no oportunidades de negocio. Claro, que no es fácil que esto ocurra si el que tiene que ponerlo es un registrador de la propiedad, de cuyas filas han salido los últimos cien recorguinnes de tíos sosos y aburridos. En fin. Mañana hay otra manifestación, una cacerolada contra los bancos que quitan casas y luego no pagan sus deudas y nos pringan a los demás. Y el domingo estamos convocados a otro gesto de resistencia. El Intermedio nos anima a ocupar nuestras casas a las siete de mañana. Todos en casa para protestar contra los recortes. No podemos faltar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario